Qué hay detrás del envío de alias ‘Pichi’ a la temible cárcel Tramacúa
Lo vinculan a ocho crímenes. Sicario fue torturado y encementado. Tuvo lujoso predio por cárcel.
En la estación de policía de la Mesa de los Santos, el sitio en donde más tiembla en Colombia, está recluido desde diciembre pasado el señalado capo Óscar Camargo Río, alias Pichi, considerado el dueño de un sector del hampa en Bucaramanga y en varios municipios de Santander, con tentáculos incluso en Antioquia.
Dos mayores de la Policía, a cargo de un grupo élite, lo custodian día y noche, desde que el 28 de diciembre, comandos de la Sijín de Bucaramanga, la Dijín y la Dipol lo capturaron en medio de un megaoperativo, en una lujosa finca en Bello, Antioquia.
A pesar de los controles, ya está todo listo para que este lunes sea trasladado a una celda de la temible cárcel de máxima seguridad de Valledupar, conocida como La Tramacúa.
Sus antecedentes criminales, que datan de 2011, y el hecho de que haya escapado dos veces serían suficientes para enviarlo a ese lugar, en donde hay capos de la talla ‘Tommy Masacre’ y ‘Lindolfo’, además, asesinos y violadores como Rafael Uribe Noguera y Luis Alfredo Garavito.
Según parece su traslado se aceleró por recientes hallazgos de la Policía de Bucaramanga, judicializados por el personal especializado que envió el fiscal general, Francisco Barbosa.
Modelo, muertos y fortuna
Además del manejo del microtráfico, testigos bajo protección vinculan a su estructura criminal con el reciente crimen de una pareja (que transportaba marihuana y a una niña). También, con la desaparición de Jefferson Delgado, alias Máscara, miembro de su banda, quien trabajaba ahora para alias Poporro, archienemigo de ‘Pichi’.
‘Máscara’ fue localizado en una zona boscosa por los perros que ubicaron a los periodistas ecuatorianos que asesinó ‘Guacho’. El sicario fue torturado, asesinado, enterrado a 50 centímetros y tapado con una plancha de cemento.
Informantes dieron pistas sobre ese y otros ocho crímenes, ligados a la estructura de ‘Pichi’. También hablaron de su pareja –una modelo– y de varios bienes, ahora en la mira.
Si bien la Policía tenía en la retina a ‘Pichi’ desde 2011, cuando aseguran que heredó la estructura criminal de su familia; en 2015 se voló desde un consultorio al que asistió tras su primera captura. La escena fue muy similar a la del escape de Aida Merlano, años después.
Las voladas y el domicilio
En 2018, ‘Pichi’ fue recapturado. Esa vez firmó un preacuerdo en el que aceptó delitos –como jefe de la estructura criminal– y pidió domiciliaria.
“Dejó como domicilio un lujoso apartamento, en el norte de Bogotá, y luego una valiosa propiedad en Antioquia”, dijo un investigador. Y aseguró que en la segunda fase de esta investigación van a verificar de quién son esas dos propiedades y otras más en la mira.
‘Pichi’ fue ubicado en un lujoso predio semirrural, en donde uniformados infiltrados y drones detectaron carros de alta gama con la modelo y allegados. ‘Pichi’ se voló, pero tras saltar tres cercas (que le rayaron el cuerpo), y antes de llegar a la carretera, fue capturado.
Al igual que otros capturados, no aceptó ninguno de los cargos. Pero algunos ya buscan preacuerdos.
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